Todos soñamos con tener una casa bonita, quizá los programas de televisión o las revistas de decoración sean las culpables, pero no siempre es fácil de aplicar en nuestro hogar. Normalmente ocurre que no solemos estar a gusto con cómo están organizadas las habitaciones, los acabados o con la propia estética, por lo que reformar íntegramente la casa como aseguran la experimentada empresa de Reta2 es una interesante opción donde hay que optar siempre por la calidad y la profesionalidad.
Una vez hemos decidido la reforma de la vivienda, hay que prestar atención a lo siguiente:
Antes de empezar la obra
Hay que tener bien claro lo que se quiere hacer y los medios que tenemos a nuestra disposición. En el caso de las reformas integrales, desde que nos decidimos a realizar la reforma hasta que acaba van a pasar varios meses, por lo que hay que tener muy bien pensado cómo abordaremos dicho tema.
No solo es saber en qué consistirá la reforma, también pensar en el largo plazo
De esta forma vamos a poder prever los detalles que tengan influencia en las utilizaciones de las habitaciones en el futuro. Así es como vamos a lograr que una reforma puede perdurar con el paso de los años.
Contar con una idea global
Esto es lo mejor, pues una vez se tiene claro lo que se necesita y quiere, hay que intentar que quede bien distribuido. Por ello debemos de tener un arquitecto encargado para poder visualizar el espacio y cómo van a estar distribuidas las cosas, según las necesidades que vayamos a tener.
Existen algunas empresas que se dedican a las reformas y que tienen este tipo de perfil en la empresa, que sin que cueste demasiado, pasa a formar parte de la propuesta, lo mismo que la elaboración del presupuesto.
Petición de presupuestos en los acabados
Es algo muy necesario en bastantes temas, puesto que dependiendo de lo que decidamos, esto va a tener gran influencia en el presupuesto final que va a tener la obra en cuestión. De todas maneras, las empresas a la que vayamos a encargar el proyecto de reforma tiene que adaptar los materiales que elijamos al presupuesto.
Baraja más de una empresa
Hay que barajar ofertas de dos o tres empresas para poder disfrutar de un abanico de opciones con el que podamos sopesar cuál nos va a generar mayor confianza. Para ello, hay que asegurarse de que todos los presupuestos tengan las mismas referencias en el campo del diseño y de la calidad, para así poder comparar en las mismas condiciones.
Es también ventajoso realizar una serie de mediciones antes en las que cuales cada empresa pueda llegar a proyectar las condiciones económicas. No olvidemos que hay muchas empresas de reformas en la actualidad y hay que compararlas con empresas similares.
Un presupuesto de reforma integral tiene algunos aspectos básicos
Entre ellos podemos hablar de la demolición, albañilería, electricidad, fontanería, pintura o carpintería. De igual manera debe venir el coste por unidad de todas las partidas y el periodo de tiempo para la ejecución, así como la forma de pago que se pacte.
Cuanto más detallado sea el control, más se podrán bajar o subir algunas de las partidas, dependiendo de la calidad de acabados por los que nos terminemos decidiendo.
Los materiales de calidad
No hay que escatimar, pues los materiales son importantes y tienen que quedar bien, No hay que mirar solo la parte meramente estética, pues elegir los materiales es bastante más que todo eso.
Fundamental proceder a firmar el contrato de obra donde queden estipuladas las condiciones que habrá en cuanto a los costes, plazos, calidades o las condiciones de pago, pues se deben establecer las cláusulas pueden penalizar las desviaciones que se produzcan en ese sentido.
El equipo debe ser multidisciplinar
Siempre es bueno que haya un equipo multidisciplinar, donde haya perfiles distintos, casi del arquitecto que colaboren con los planos, el consejo de un interiorista, o los jefes de obras. Las obras son complejas y los profesionales de calidad nunca sobran para llevar a cabo una buena obra.
Conoce bien la empresa que se encargue de tu reforma
En este sentido conviene mirar más de una empresa y pedir el seguro de responsabilidad civil, así como el certificado de la AEAT que pueda demostrar que la empresa en cuestión está al corriente de las obligaciones fiscales a este respecto.
Las reformas integrales son un trabajo complejo y en este sentido conviene no dejar nada al azar, puesto que de lo contrario podemos terminar pagándolo con una mala reforma que haga que tengamos que gastar más dinero del previsto si queremos tenerlo a nuestro gusto.