Lanzarote, la isla de los famosos.

Muchos famosos han elegido pasar largas temporadas en la isla de Lanzarote para relajarse y desconectar de sus atareadas agendas. No parece ser una moda pasajera, sino más bien, que las celebridades han descubierto un rincón paradisiaco en el que desconectar.

Personalidades de todas las áreas han reconocido públicamente que veranean en Lanzarote. El actor Jon Kortajarena, la actriz María Valverde, el jugador de baloncesto Rudy Fernández o el expresidente del gobierno José Luis Rodríguez Zapatero son asiduos visitantes. El Premio Nobel de literatura portugués José Saramago pasó sus últimos años de vida en Lanzarote hasta que murió en el 2010.

Pero la isla de Lanzarote no está reservada para personas ricas y famosas. Ben, un turista británico apasionado por nuestro país, nos comenta haber pasado unas bonitas vacaciones en Suite Isabela, una de esas villas turísticas, integradas en el paisaje, que se distribuyen a lo ancho y alto de la isla canaria.

Varios son los atractivos que hacen que personas famosas y otras normales y corrientes se decanten por descansar en Lanzarote. Uno de ellos es su clima, una temperatura media de unos 25 grados y más de 4.400 horas de sol al año. Otro, sin duda, son sus espectaculares paisajes, de los que hablaremos más adelante. Y finalmente, no podemos olvidarnos del contacto con la naturaleza. Sí, porque la naturaleza está muy presente en Lanzarote.

Es un turismo íntimo. De disfrutar del momento y compartirlo con la gente a la que aprecias. De recargar energías. No tanto un turismo de “postureo” y de dejarse ver con gente guapa.

En los años 80, sin despreciar esta ciudad malagueña, Marbella se convirtió en la Meca de la Jet Set. Cualquier personaje que aspiraba a tener algo de relevancia en la crónica social veraneaba en esta localidad de la Costa del Sol. Personajes como Gunilla Von Bismarc, el aristócrata Juan de Mora y Aragón y el playboy Espartaco Santony contribuyeron activamente a promoverla.

Marbella era una sucesión de grandes fiestas de lujo y glamur en el que se mezclaban nobles de España con actores procedentes de Hollywood y personajes del “artisteo” nacional. Todo eso, ante la atenta mirada de los Paparazzi que dejaban testimonio gráfico de aquellos momentos.

En la década siguiente, Marbella cayó en decadencia. El estallido de la corrupción inmobiliaria terminó por sepultarla. No es que Marbella haya dejado de ser un destino turístico, pero hoy, esta ciudad no es ni la sombra de lo que fue.

Lanzarote atrae la mirada de algunos famosos, pero digamos, que con un enfoque diferente.

Famosos en Lanzarote.

Por Lanzarote se han dejado ver en algún momento la cantante Aitana, el actor Mario Casas, la actriz Blanca Suárez y el actor y director Paco León.

El periódico El Español nos habla del chalet que mandó construir el actor y modelo Jon Kortajarena a las afueras de Famara, un pequeño pueblo pesquero situado al norte de la isla.

Kortajerana, original de Bilbao, conocía la isla desde pequeño, puesto que este era un lugar en el que habitualmente veraneaba con su madre. En su adolescencia estudió en el Colegio Internacional Las Arenas, ubicado en Lanzarote, cuando ya había iniciado su carrera como modelo.

Jon viaja por todo el mundo. Grabando películas entre Estados Unidos y España, y cediendo su imagen para marcas de perfumería y alta costura como Jean Paul Gautier, Giorgio Armani, Hugo Boss o Dolce & Babbana. Eso sí, entre proyecto y proyecto, decide descansar en Lanzarote.

Su villa, Casa Sua, está orientada al este. Formada por estancias grandes y espaciosas iluminadas por la luz natural que entra por sus ventanales. Una parte de sus habitaciones interiores no tienen puerta. La idea era crear un espacio libre por el que la luz, la energía y las personas circulen libremente. Ninguna de las estancias dispone de televisión. Fue una decisión consciente. Cuando Jon llega a su casa de Lanzarote, lo que quiere es desconectar del mundo.

Otra de las cosas que nos llaman la atención es que la bañera, la ducha y el inodoro están colocados al aire libre. Integrados en el paisaje rocoso que lo rodea. Desde luego la temperatura lo permite. La idea de Jon era experimentar en absoluta libertad.

Levantada sobre un peñasco, la piscina que preside la parte frontal de la casa, parece un mirador orientado al mar. Situado a tres kilómetros de distancia de la vivienda.

Su embrujo natural.

Lanzarote tiene un paisaje natural completamente único, diferente al de las otras islas canarias. Su origen, formado por la erupción de varios volcanes, su proximidad a las costas del Sahara y la ausencia de precipitaciones, le da una singularidad en que parece que sus escenarios naturales están sacados de otro planeta.

No en vano, la mayor parte de la isla está formada por espacios naturales protegidos, y la UNESCO la declaró en 1993 Reserva Natural de la Biosfera. Dentro de sus parajes naturales, la web Biosphere Sustainabe destaca 5 especialmente:

  • Parque Nacional de Timanfaya.   

Ocupa aproximadamente la cuarta parte de la isla. Algo más de 50 Kilómetros cuadrados. En su interior se pueden apreciar 25 volcanes, además de campos de lava y sedimentos volcánicos. Ofrece una apariencia marciana, altamente seductora. La imagen que se nos vendría a la cabeza si nos imagináramos los campos de otros planetas. Por la fragilidad de su ecosistema, el acceso al parque está restringido. Pidiendo permiso al cabildo se puede recorrer en visitas guiadas en autobús o mediante caminatas.

  • Parque Natural de los Volcanes.

Rodeando el parque de Timanfaya se encuentra el parque de los volcanes, entre los municipios de Yaiza, Tías y Tinajo, penetrando en el océano. El origen de esta formación geológica se debe a que cuando el volcán de Timanfaya entró en erupción en 1730 y 1736; la lava, al ponerse en contacto con el mar, se enfrió rápidamente, creando un terreno de características diferentes. De hecho, mientras que el Parque Nacional del Timanfaya presenta una escasa vegetación, en el Parque Nacional de los Volcanes podemos encontrar líquenes y arbustos que se han logrado adaptar a las condiciones extremas del suelo.

  • Reserva natural de los islotes.

Al norte de la isla podemos divisar islotes prácticamente desiertos que forman parte del Archipiélago Chinijo. Son el islote de la Montaña de Santa Clara, el Roque del Este y el Roque del Oeste. Son enclaves de gran valor biológico, puesto que representan puntos de reproducción de aves marinas del Atlántico Occidental. Sus costas albergan una rica flora y fauna autóctona.

En la actualidad son espacios restringidos. No se permite la presencia humana en ninguno de los islotes, ni la práctica del submarinismo en sus aguas. Se pueden observar más de cerca si participamos en alguna excursión marítima a bordo de un barco.

Esto no sucede en la Isla de la Graciosa, más grande del Archipiélago Chinijo. La podemos visitar por tiempo limitado, pidiendo cita previa en el Cabildo de la isla.

  • Los Ajalaches.

Este es otro espacio natural de singular belleza. Se encuentra al sur de Lanzarote. Se trata de un macizo de montañas redondeadas que bien pudieran parecer dunas, si no comprobamos que están formadas por roca volcánica. Es una de las formaciones geológicas más antiguas de Lanzarote. Se configuró hace 20 millones de años con el nacimiento de la isla. En él podemos apreciar especies vegetales autóctonas, algunas en peligro de extinción, como la tabaiba.

Desde los Ajalaches se divisa la vecina isla de Fuerteventura y la Isla de los Lobos, situada a medio camino.

  • Los Jameos del Agua.

Los Jameos son cuevas naturales que se han creado en la base de los volcanes, y que algunas de ellas se ha llenado de agua, formando lagunas. De entre ellos destacan los Jameos del Agua, un área subterránea creada por la erupción del volcán de la Corona hace millones de años y que el arquitecto Cesar Manrique acondicionó para visitarla, aprovechando la orografía.

Cesar Manrique y la integración con la naturaleza.

Es incalculable la contribución que el arquitecto y escultor Cesar Manrique ha hecho por Lanzarote, la isla que le vio nacer.

Después de triunfar en Nueva York, Cesar regresa a Lanzarote para promover el turismo, potenciando la belleza natural de la isla. Con proyectos integrados en la naturaleza, respetuosos con el medio y que lo que hacen es realzar sus atractivos.

Además de los Jameos del Agua, de los que ya hemos hablado anteriormente, Cesar Manrique proyecta el Jardín del Cactus. Un jardín botánico en el que se exponen 10.000 ejemplares de cactus procedentes de las Islas Canarias, Marruecos, Madagascar y América, partiendo de las instalaciones de una antigua cantera en desuso.

Otro lugar destacado el Mirador del Risco de Famara o Mirador del Río. Un mirador excavado en la roca de un acantilado, en el norte de la isla, que ofrece unas vistas espectaculares a los islotes del Archipiélago Chinijo.

En la isla puedes visitar más muestras de su trabajo como La Residencia de la Maheta, el Taro de Tahínche o el Asador de Timanfaya.

Un ejemplo del planteamiento arquitectónico de Lanzarote. Basado en promover el turismo, respetando la naturaleza.

También podrías disfrutar