Si te estás preguntando si se puede aislar una casa sin obras, ¡bienvenido! Estás en el lugar adecuado. ¡Quédate! Y descubre con nosotros el aislamiento insuflado para aislar tu casa sin obras. La respuesta a si se puede aislar una casa sin obras es sí, un sí rotundo. Vamos a ver cómo se aísla una casa sin necesidad de obra. ¿Te apuntas?
¿Cómo se aísla una casa sin obras?
Hemos hablado con Creasrsur, empresa referente en aislamiento térmico y acústico sin obras en Granada, con más de 15 años de experiencia en el sector de la construcción, y nos ha explicado cómo se aísla una casa sin obras. Existen varias técnicas para aislar una casa sin necesidad de obra. Una de las más comunes es el aislamiento interior, que consiste en colocar un material aislante en el interior de la pared, techo o suelo. El material puede ser de diferentes tipos, como la lana mineral, el poliestireno expandido o poliuretano.
Otra técnica que se puede utilizar para aislar una casa sin obras es el aislamiento exterior, que consiste en colocar un material aislante en el exterior de la pared, en el suelo o en el techo. Este material se fija con tornillos o adhesivos.
También se utiliza el aislamiento por insuflado. Este tipo de aislamiento consiste en inyectar aislante en las cámaras de aire de las paredes. Este material se proyecta con una máquina especial.
Por último, se puede utilizar el aislamiento por proyección, que consiste en proyectar un material aislante sobre las paredes, suelo o techo.
La técnica de aislamiento adecuada para tu casa depende de las características de la vivienda y de los objetivos del aislamiento.
¿Por qué te conviene aislar tu casa sin obras? Es una solución rápida y económica, no requiere permisos ni licencias de obra y no genera escombros ni molestias a los vecinos.
Aunque la eficiencia del aislamiento sin obra puede ser menor que la del aislamiento con obras. Y en algunos casos, puede ser necesario realizar reparaciones en el interior de la vivienda.
Aislamiento insuflado para aislar una casa sin obras
¿Qué es el aislamiento insuflado?
El aislamiento insuflado es una técnica de aislamiento térmico que consiste en inyectar un material aislante en las cámaras de aire de las paredes, techos o suelos. Este material se inyecta con una máquina especial y se introduce a través de pequeños orificios hechos en el techo o la pared. Después, el material aislante se distribuye por toda la cámara de aire.
Los materiales aislantes que se utilizan en este tipo de aislamiento son de diferentes tipos, como lana mineral, poliestireno expandido o poliuretano. La elección del material más adecuado depende de factores como, las características de la casa y los objetivos del aislamiento.
El aislamiento insuflado es una buena opción para aislar una casa sin obras. Además, es una solución económica y rápida. No se necesitan permisos ni licencias de obra y no genera escombros ni molestias a los vecinos.
Son muchos los motivos por los que elegir el aislamiento insuflado, como por ejemplo: reduce el consumo de energía, mejora el confort térmico y reduce la humedad de la vivienda.
Es muy importante elegir un material aislante de calidad y que la instalación la realice un profesional cualificado. También es fundamental realizar un seguimiento del aislamiento para comprobar que esté en buen estado.
El aislamiento insuflado es una solución eficaz para mejorar el aislamiento térmico de una vivienda. Es la opción ideal para viviendas que no necesiten un aislante muy elevado o que no puedan realizar obras de construcción.
Cómo se realiza el aislamiento insuflado
A continuación, te explicamos cuáles son los pasos a seguir para realizar el aislamiento insuflado:
- Preparación de la superficie. Hay que limpiar la superficie donde se va a inyectar el material aislante. Es importante eliminar la suciedad, polvo o restos que obstruyan la máquina de insuflado. También es importante limpiar la superficie para que el material aislante se adhiera de forma correcta.
- Realización de orificios. Después de limpiar la superficie, se realizan los orificios necesarios para introducir la máquina de insuflado. La distancia entre los orificios tiene que ser de 30 o 40 centímetros. Y los orificios se realizan en puntos estratégicos de la cámara de aire, como en los extremos o en los puntos de unión entre paredes. Deben de ser lo suficientemente grandes para que quepa la máquina de insuflado.
- Inyección del material aislante. A continuación, se inyecta el material aislante a presión. Este material se distribuye por toda la cámara de aire y se rellenan todos los huecos. La máquina de insuflado tiene un dispositivo que permite controlar la presión y la densidad del material aislante.
- Cierre de los orificios. Por último, se cierran los orificios con material de sellado. Este material de sellado evita que el material aislante se escape de la cámara de aire. Además, evita la entrada de frío o calor por los orificios.
El tiempo necesario para realizar el aislamiento insuflado depende de la superficie a aislar. En general, se puede aislar una vivienda de tamaño medio en pocas horas.
Consejos para realizar el aislamiento insuflado de manera correcta
A continuación, te damos una serie de consejos para realizar el aislamiento insuflado de manera correcta:
- Es importante que elijas un material aislante adecuado para tu vivienda y las condiciones climáticas.
- Es fundamental contratar a una empresa profesional para realizar el aislamiento insuflado.
- Debes seguir las instrucciones de la empresa instaladora para garantizar la eficacia del aislamiento.
¿Qué materiales se utilizan en el aislamiento insuflado?
Los materiales utilizados en el aislamiento insuflado son los siguientes:
- Lana mineral. Es un material aislante natural hecho de fibras de roca o vidrio. Es ligero y flexible, por ello ofrece un buen aislamiento térmico y acústico.
- Poliestireno expandido. Es un material aislante sintético hecho de pequeñas burbujas de aire. Es resistente y ligero, por ello ofrece un buen aislamiento térmico.
- Poliuretano. El poliuretano es un material aislante sintético que se inyecta en forma líquida. Es un material flexible y ligero que ofrece un buen aislamiento acústico y térmico.
¿Qué tipo de aislamiento insuflado es el mejor?
Como te hemos explicado, el aislamiento insuflado más adecuado depende de las características de la vivienda y de los objetivos del aislamiento.
La lana mineral es una opción adecuada para viviendas que necesitan un aislamiento térmico y acústico elevado.
El poliestireno expandido es una buena opción para viviendas que necesitan un aislamiento térmico elevado y un coste reducido.
El poliuretano es una opción perfecta para viviendas que requieran un aislamiento térmico y acústico elevado y una ejecución rápida.
¿Es necesario realizar mantenimiento al aislamiento insuflado?
Lo normal es que no se haga ningún tipo de mantenimiento al aislamiento insuflado. Sin embargo, es importante revisar el aislamiento de manera periódica para detectar posibles fallos. Además, es fundamental que los orificios de inyección se mantengan cerrados para evitar que el material aislante se desplace.
¿Es el aislamiento insuflado una buena opción para tu casa?
El aislamiento insuflado es perfecto para tu casa si la vivienda cumple los siguientes requisitos:
- Si la casa tiene cámaras de aire en las paredes, techo o suelo.
- En el caso de que tu vivienda no necesite un aislamiento térmico muy elevado.
- Si la casa no necesita obras de construcción.
- Lo perfecto es consultar con un profesional para determinar cuál es el aislamiento adecuado para tu vivienda.
Terminamos con una ventaja del aislamiento insuflado y es que puede durar muchos años dependiendo del material aislante utilizado. Por ejemplo, la lana mineral puede durar, nada más y nada menos que 50 años.
Si ahora te preguntan, ¿se puede aislar una casa sin obra? Ya sabes la respuesta: si es posible, y una de las opciones para aislar una casa sin obra es el aislamiento insuflado.